Cambio de caldera de gas por solución de aerotermia con suelo radiante y energía solar térmica

Hablamos de un chalet unifamiliar de tres plantas que son accesibles tanto por escalera como por ascensor. Tiene orientación sur-suroeste y una superficie total de 260 m². Su fachada, de formas rectas y grandes ventanales, denota que se trata de un chalet moderno, con la calidad de construcción y aislamiento que corresponde (código técnico 2000). Además, acaba de estrenar un nuevo sistema de climatización basado en aerotermia; un cambio que le ha hecho ganar en sostenibilidad, ahorro y confort.    

Antes de la ejecución de la obra, la vivienda tenía un sistema de calefacción mediante caldera de gas, con emisión por suelo radiante refrescante, y refrigeración mediante aire acondicionado por conductos. Contaba también con un sistema de energía solar térmica como apoyo para el servicio de agua caliente.  

Se dieron dos circunstancias para que los propietarios se decidieran a cambiar el generador anterior. Por un lado, el alto consumo de la caldera de gas, que hacía recomendable sustituirla aunque no hubiera agotado su vida útil. Por otra parte, el hecho de que la instalación de aire acondicionado se hubiera estropeado. Y es que instalando una solución basada en aerotermia cabía la posibilidad de utilizar el suelo radiante para suplir su función. Como ya contamos aquí, una instalación aerotérmica puede usarse tanto para generar calor, como para refrescar una vivienda. Simplemente hay que invertir su funcionamiento para que, en lugar de captar calor del exterior y emitirlo dentro de la vivienda, lo capte en el interior y lo expulse al exterior. Se consigue así calefacción y "aire acondicionado" con una misma instalación.

Por último, los propietarios quisieron también aprovechar el cambio para zonificar el sistema emisor, de manera que las estancias pudieran caldearse o enfriarse independientemente. Hasta entonces la tenían dividida por plantas.

Después de estudiar el proyecto, la empresa instaladora, Eco-Cima, recomendó una solución doble de Saunier Duval. Para la producción de agua caliente, una bomba de calor específica para esa función: una Magna Aqua de 270 litros, instalada en una sala de calderas, que trabaja en línea con la solución solar térmica anteriormente mencionada; y para la calefacción y la refrigeración, una bomba de calor Genia Air Max 15 situada en el jardín. Los técnicos de Eco-Cima estimaron que Genia Air Max era la solución idónea para una vivienda de semejante tamaño ya que, a pesar de su tamaño compacto, ofrece una potencia y rendimiento excepcionales, lo que evita tener que instalar varias bombas de calor de menor potencia, con lo que esto supone de ahorro respecto al coste de la instalación.

En cuanto al control zonificado por estancias, se ha conseguido con MiPro Sense, que no solo permite controlar de manera sencilla y muy intuitiva la solución completa (aerotermia, sistema de energía solar térmica y suelo radiante refrescante), sino además el consumo energético.  

Hablando de consumo energético, la nueva instalación ha superado el 40% de ahorro frente al sistema basado en gas. Y eso sin contar que no ha sido necesario cambiar el sistema emisor ni el apoyo térmico solar. De todas formas, si algo destacan los propietarios es la mejora en el confort de la vivienda.