Climatización inteligente y renovable en una vivienda en Torrejón de Ardoz

Instalación de alta eficiencia y bajo consumo con suelo radiante, bomba de calor, energía solar y caldera de condensación

Cuando los propietarios de esta vivienda proyectaron su nuevo hogar tenían claro que querían dotarlo de suelo radiante, por su ya probada eficiencia y el alto nivel de confort que aporta. Nada sabían de aerotermia aún, pero una cosa llevó a la otra —hemos comentado en varias ocasiones que el suelo radiante es el aliado natural de la bomba de calor— y, debidamente asesorados, terminaron apostando por un sistema híbrido.

Han participado en este proyecto

Saunier Duval

Tecnología

Hablamos de una vivienda unifamiliar totalmente aislada, de 250 m2 repartidos en dos alturas, que cuenta con cocina, salón, cuatro habitaciones, dos baños y un aseo. Al tratarse de un edificio de nueva construcción se ha puesto especial cuidado en potenciar su eficiencia, dotándolo de una envolvente de calidad y ventanas térmicas.

Y es que limitar las pérdidas de calor (y también su infiltración, claro), es el primer paso para lograr un edificio sostenible y eficiente. El otro paso consiste en dotar a la vivienda de un buen sistema de climatización renovable que asegure un óptimo confort en la vivienda y garantice un espectacular ahorro. 

Como hemos dicho, los propietarios tenían claro que querían instalar suelo radiante, no solo por la sensación de bienestar que aporta tanto en período de calefacción como en verano, sino porque es un sistema que contribuye a mejorar el ahorro y la eficiencia energética, mejorando la calidad de vida de los usuarios. Y estas prioridades fueron las que trasladaron a la contructora, que a su vez les puso en contacto con los profesionales de Instalaciones Ulloa

Los técnicos lo vieron claro, la aerotermia era la solución perfecta para satisfacer las demandas de los propietarios. Al final se decantaron por una instalación híbrida, con una bomba de calor como generador principal para calefacción y agua caliente y una caldera de condensación como sistema de apoyo para ambos servicios.

El peso de la climatización recae pues en una bomba de calor aire/agua, en este caso una Genia Air de 8 kW. En el tejado dos placas solares térmicas Helioset sirven de apoyo, tanto a la calefacción como al agua caliente, mientras que en el sótano una caldera Isotwin F30 aguarda para entrar en acción en momentos de máxima demanda. Junto a la caldera se han instalado un depósito para el agua caliente y otros elementos del equipo. Los propietarios decidieron hacer la inslatación en el sótano para su propia comodidad ya que no es necesario contar con grandes espacios disponibles para la instalación de los equipos.

Una de las ventajas del sistema escogido es que, además de calentar la vivienda, también sirve para refrescarla a través del mismo suelo radiante, por lo que los propietarios se han ahorrado el tener que invertir, además, en un sistema de aire acondicionado.

Las estimaciones iniciales preveían un ahorro de en torno al 40% respecto a un sistema de climatización tradicional, y aunque se trata de un edificio de nueva construcción y por lo tanto no hay datos para comparar, los propietarios han manifestado estar encantados, no sólo con el gasto, que es muy bajo, sino también con el rendimiento y el confort que aporta el equipo.